Desde la aparición del Hombre, la Luna ha generado numerosas reacciones y creencias y ha dado origen a religiones, teorías científicas, supersticiones y agendas políticas. Algo que siempre nos ha fascinado son las «sombras» que parecen caer sobre la Luna. Muchas personas creen que estas sombras se deben a que la Tierra impide que los rayos del Sol lleguen a la Luna, pero no es cierto.Si vemos distintas fases de la Luna es porque el ángulo desde el que la luz llega a la Luna varía según la posición de la Tierra y el Sol.
La Tierra realiza una rotación completa cada 24 horas, mientras que la Luna tarda 29,5 días en realizar la suya. Durante estas fases, la Luna pasa por un ciclo que todos podemos contemplar y seguir. Al representar sutilmente las fases lunares a las 6 horas, el reloj Frederique Constant Moon Timer rinde un especial homenaje a la Luna.
Esta pieza, impulsada por el Calibre FC-330, movimiento mecánico automático, con una frecuencia de 28.800 alternancias por hora, y hasta 42 horas de reserva de energía; se puede contemplar a través de la parte trasera de la caja, fabricada en acero inoxidable y con 43mm de diámetro.
Este modelo es un reloj de bella factura y gran delicadeza en su decoración. Su diseño clásico es extremadamente depurado y funcional. Está disponible con una correa de piel cosida a mano o con un brazalete de acero inoxidable elegante y deportivo. Las correas están disponibles en color marrón oscuro y negro oscuro, para combinar con las diferentes versiones de esferas. Es hermético hasta los 100 metros.
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